Para garantizar que se cumplan las condiciones de transporte óptimas para sus cargas, le recomendamos tener en cuenta los factores de temperatura y humedad dentro del contenedor y la circulación libre de aire fresco.
Temperatura
Cada producto tiene una temperatura óptima de almacenaje, la cual representa la condición ideal para su transporte. Generalmente, esta es la temperatura más baja que un producto puede soportar para no sufrir daños por frío o congelación.
Daño por frío
El daño por frío es un daño fisiológico que se produce en productos tropicales y subtropicales que han sido expuestos a bajas temperaturas pero que no llegan al punto de congelación. El ejemplo más común es el oscurecimiento de las cáscaras de bananas. Mientras el producto sigue en temperaturas frías el daño por frío pasa inadvertido pero una vez que el producto vuelve a temperatura natural o ‘ambiente’, los daños aparecen rápidamente.
Daño por congelación
Los productos que pueden soportar temperaturas frías sin padecer daños por frío pueden dañarse si alcanzan el punto de congelamiento. Esto ocurre cuando la estructura celular de un producto se rompe por la expansión del agua durante el proceso de congelamiento. El ejemplo más común son los productos que parecen puestos en remojo con estructuras dañadas.
Humedad
Los niveles de humedad juegan un papel fundamental para lograr la condición ideal de la carga durante el tránsito. Por lo tanto, es importante garantizar que se mantengan los correctos niveles de humedad para evitar que las materias primas se marchiten o resequen.
Tenga en cuenta que los servicios que ofrecemos solo pueden reducir la humedad, nosotros no podemos elevar los niveles de humedad dentro del contenedor.
Dióxido de carbono
La ventilación es fundamental en el transporte de cargas frescas para evitar el daño a las materias primas causado por una acumulación de dióxido de carbono en la atmósfera. Las peras y las manzanas son productos susceptibles de ser dañados si hay mucho dióxido de carbono dentro del contenedor. El daño causado debido a los niveles de dióxido de carbono demasiado elevados se puede apreciar en la decoloración del tejido interno de los productos frescos.
Etileno
En el transporte de cargas frescas es importante tener en cuenta la producción de etileno. El etileno es una hormona vinculada a la maduración/envejecimiento y es producido por todas las frutas, vegetales y flores. A pesar de que el etileno es necesario para el proceso de maduración de la fruta, podría dañar otra carga, como por ejemplo, las verduras de hojas verdes.
Aire fresco
Para evitar posibles riesgos en las condiciones de la carga durante el transporte, se puede introducir un flujo de aire fresco. Esto minimiza los niveles de dióxido de carbono y de etileno dentro del contenedor y aumenta los niveles de humedad. Sin embargo, es importante garantizar que las ventilaciones no estén demasiado abiertas para evitar la entrada excesiva de agua.
Teniendo en cuenta estos factores, nuestras recomendaciones para el transporte seguro de materias primas perecederas son:
Otros links de utilidad para carga refrigerada:
Guía de cargas consolidadas
Transportando productos refrigerados
Transportando productos congelados